Dalí contra el arte moderno

La Galatea, de Rafael Sanzio (1511), en la Villa Farnesina, en el barrio de Trastévere de Roma, una de las principales obras mitológicas de Rafael Sanzio, uno de los pintores más admirados por Salvador Dalí (Wikimedia Commons)

Aquí un momento poco conocido de Salvador Dalí, el gran artista surrealista. Su ensayo sobre El ángelus de Millet es el más apreciado. Pero aquí, En los viejos cornudos del arte moderno (1956), el genial catalán a pesar de ser referente esencial de la vanguardia, no reprime su desprecio por un arte moderno que privilegia la fealdad, y el desdén por una técnica con la excelencia para pintar como Rafael.

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